LA SITUACIÓN DE LAS DROGAS EN EUROPA HASTA 2022
Una visión general y una evaluación de las amenazas emergentes y las novedades.
El Informe Europeo sobre Drogas 2022 se basa en los últimos datos disponibles para ofrecer una visión general de los nuevos problemas relacionados con las drogas que afectan a Europa. Sobre la base de un enfoque de método mixto, utilizando datos de diversas fuentes rutinarias y complementarias, presenta un análisis de la situación actual y destaca también algunas novedades que pueden tener implicaciones importantes para la política sobre drogas y para los profesionales en Europa.
La situación de las drogas en Europa hasta 2022
La evaluación general es que la disponibilidad y el consumo de drogas se mantienen en niveles elevados en toda la Unión Europea, aunque existen diferencias considerables entre países. Se estima que aproximadamente 83,4 millones o el 29 % de los adultos (de 15 a 64 años) de la Unión Europea han consumido alguna vez una droga ilegal, con un mayor número de hombres (50,5 millones) que de mujeres (33 millones) que han notificado su consumo. El cannabis sigue siendo la sustancia más consumida, con más de 22 millones de adultos europeos que declararon haber consumido cannabis en el último año. Los estimulantes son la segunda categoría notificada con mayor frecuencia. Se estima que en el último año 3,5 millones de adultos consumieron cocaína, 2,6 millones de MDMA y 2 millones de anfetaminas.
Alrededor de un millón de europeos consumieron heroína u otro opioide ilegal en el último año. Aunque la prevalencia del consumo es menor en el caso de los opioides que en el de otras drogas, los opioides siguen representando la mayor parte de los daños atribuidos al consumo de drogas ilegales. Esto queda ilustrado por la presencia de opioides, a menudo en combinación con otras sustancias, que se detectó en alrededor de tres cuartas partes de las sobredosis mortales notificadas en la Unión Europea en 2020. Es importante señalar que la mayoría de las personas con problemas de drogas consumen una serie de sustancias. También se observa una complejidad considerablemente mayor en las pautas de consumo de drogas, ya que los medicamentos, las nuevas sustancias psicoactivas no controladas y sustancias como la ketamina y el GBL/GHB se asocian ahora a problemas de drogas en algunos países o entre algunos grupos. Esta complejidad se refleja en el reconocimiento cada vez mayor de que el consumo de drogas está relacionado con, o complica la respuesta a, una amplia gama de los problemas sanitarios y sociales más acuciantes de la actualidad. Entre estos problemas se encuentran los problemas de salud mental y las autolesiones, la falta de vivienda, la delincuencia juvenil y la explotación de personas y comunidades vulnerables.
