Andrés Fuentes, I Premio PIVESPORT a los Valores en el Deporte
La primera edición del Premio PIVESPORT a los Valores en el Deporte ha premiado a Andrés Fuentes Martín, una leyenda del voleibol a escala nacional, que a sus 85 años y delicado de salud, sigue dando lecciones de este deporte a quienes se acercan a pedirle consejo.
En una ceremonia solemne y sencilla pero sobre todo entrañable, como ha subrayado en su emocionada laudatoria nuestro Coordinador, se ha rendido sincero homenaje y reconocimiento a una persona que ha debido afrontar en su vida una competición permanente, no de partidos sino de contratiempos y dificultades.
Al acto han asistido la primera teniente de alcalde y delegada de Deportes, Blanca María Fernández, los responsables de Deportes de Marbella, Antonio García, y de San Pedro Alcántara, Guillermo Granado, la presidenta, junta directiva y voluntariado de Horizonte; miembros del equipo PIVESPORT; directivos, entrenadores y jugadores del Voleibol San Pedro, vicepresidente y entrenador del Costa del Voley, y diversos medios de comunicación relacionados con el deporte.
Este es el contenido íntegro de la laudatoria que, en nombre de los miembros de Horizonte y de PIVESPORT, Luis-Domingo López, vcepresidente de la Asociación y coordinador del Programa, le ha dedicado a Andrés Fuentes en un ambiente cargado de emoción, tras el cual, la presidenta de Horizonte, Isabel García Bardón, le ha hecho entrega del trofeo, diseñado por David Marshall:
Solemnidad y sencillez son términos que se nos antojan opuestos pero hoy los convertiremos en sinónimos porque de ambos conceptos bebe este encuentro: es solemne por extraordinario, formal, válido e imponente; y es sencillo por carente de artificio, engaño o dobleces. Estos atributos conforman la persona que hoy nos convoca sin haberlo pretendido nunca. Pero, sin duda, la palabra que mejor define a la persona, y por tanto este acto, es: entrañable.
Andrés Fuentes Martín, Andrés, nuestro Andrés, estará pasando ahora mismo un mal rato. Porque él ha dedicado su vida a engrandecer al prójimo, a disfrutar viendo crecer a las personas que le han rodeado: crecer en altura y en hondura, crecer en valores. Ha sido faro para miles de jóvenes pero siempre quiso estar fuera de los focos. Por eso ahora, cuando el centro de este momento y lugar es él mismo, me consta que desearía salir corriendo, es más, creo que podría hacerlo incluso sin muletas. Pero no le vamos a dejar.
Si hay un amuleto capaz de obrar el milagro de alegrar los ojos de Andrés al margen de cuál sea su estado ánimo en cada momento, es la palabra voleibol. Resulta mantra infalible para descubrir su mejor cara y es así porque ese sonido mágico lleva asociados en el abultado baúl de sus vivencias los rostros de cada adolescente, de cada joven, en los que Andrés sembró la semilla de ese deporte que ha dado sentido a su vida.
Andrés entrenó a la selección marroquí de voleibol, creó la federación malagueña, formó en el Palo el equipo que después pasaría a llamarse Orient Puerto, creó, aquí en Marbella, el equipo Panorama que entrenaba en la zona del mismo nombre, denominado después Camicentro; de ahí salieron la mayoría de los entrenadores que siguieron su camino, creando clubes nuevos como fue el Voleibol Marbella. Ha sido el gran formador de entrenadores.
En esta ciudad nadie puede pronunciar la palabra voleibol sin que la imagen de Andrés Fuentes aparezca en su retina. Cada año, 1.500 jóvenes vienen de toda España para participar en el torneo que lleva su nombre, organizado por el Club Costa del Voley. Y la primera reunión de PIVESPORT, se celebró bajo esta misma carpa con los directivos del voleibol San Pedro que hoy actúan de anfitriones, entre los sonidos y las voces propios del Deporte.
La Asociación Horizonte, con 34 años de vida a sus espaldas, tampoco puede concebirse sin la persona de Andrés. En ella le ha tocado lidiar con lo más dramático, porque su vida no ha sido ni mucho menos un camino de rosas ni un mar en calma, y con lo más hermoso. Porque Andrés, en el fondo del pozo, es capaz de plantar la semilla de un árbol y esperar a crezca para salir de él agarrándose al tronco y trepando por las ramas acariciándolas.
Andrés, tesón y perseverancia hasta la extenuación, no cejó hasta que la Asociación tuvo una sede digna en propiedad, dispusiera de un piso de ayuda al tratamiento, contara con un gran espacio para almacén y tienda solidaria, lucho sin cuartel en los tiempos en que Marbella tocaba a escándalo diario para que Horizonte no fuera engullida por quien todo quería convertirlo en su propia finca. Andrés no es que haya sido el tesorero por antonomasia de la Asociación, es que ha sido el solucionador de todos los problemas, el manitas en carpintería, pintura, electricidad, fontanería y corazones rotos.
Y qué decir del último retoño de Horizonte: PIVESPORT. Otro fruto de esa certidumbre a prueba de batallas. Enemigo de las medias tintas y de seguir la corriente de las modas, Andrés no descansó hasta que escuchamos al fin su personalísimo criterio sobre prevención: “La única prevención que existe es el deporte. No hay más… ni menos”. Lástima no le hubiéramos hecho caso antes.
Con sus ideas clarísimas pusimos en marcha un neonato y vacilante PIVESPORT a comienzos de 2014. El primer diseño fue aprobado por la Junta Directiva como regalo tardío de Reyes: el 7 de enero. El 19 de febrero se celebró el primer partido “oficial” entre nuestros chavales de La Patera y de El Ángel; el resultado fue lo de menos. Lo presentamos en sociedad el 11 de marzo en la sede del Marbella F.C. y todos los sectores de esta bendita tierra nos fueron brindando su apoyo. A aquel crio travieso e indeciso le llegó el momento de mudar de piel y hacerse adolescente.
Un PIVESPORT 2.0 como nos gusta llamarlo ahora empezó a florecer con los olivos andaluces al final de la primavera pasada, un año ha, y con el descaro y la insensatez de la adolescencia, va buscando sin rendirse ante nada ni nadie el hueco que le corresponde en el proceloso mar de los Valores en el Deporte. ¿Camino fácil? Si así fuera no estaríamos jugando en casa. Andrés, entre muchas otras cosas, nos ha enseñado a afrontar los desafíos sin vacilar. Luchamos contra la violencia, el mercadeo, el resultado a cualquier precio, la trampa y el juego sucio. Proclamamos el respeto, el esfuerzo y la autonomía. Impulsamos el liderazgo y la ayuda que es cooperación, compañerismo y solidaridad. Y nos esforzamos para que estos Valores no queden solo en la cancha sino que trasciendan a todas las facetas: la familiar, la académica y la social.
Y todo esto, que no es poco, sin querer ser consciente de ello, lo encarna a la perfección nuestro protagonista de hoy: nuestro niño mayor, nuestro maestro sabio, nuestro amigo del alma. Por eso y porque, sencillamente no podía ser de otra manera, el pleno del Equipo PIVESPORT y de la Junta Directiva de Horizonte, han acordado por aclamación que el I Premio PIVESPORT a los Valores en el Deporte sea para quien tiene que ser: Andrés Fuentes Martín.