La Odisea de los menores de los CIS de la Asociación Horizonte
El pasado lunes, una veintena de niños pertenecientes a los Centros de Integración Socioeducativa de la Asociación Horizonte se quedaron “encerrados” en las instalaciones del CIS La Patera en la Calle Juanar, en un juego simulado en el que, para poder salir, debían superar 7 pruebas y una gran prueba final.
Cada vez están más de moda los Escape Room, es decir, juegos de aventura físico y mental que consisten en encerrar a un grupo de jugadores en una habitación, donde deberán solucionar enigmas y rompecabezas de todo tipo para ir desenlazando una historia y conseguir escapar antes de que finalice el tiempo.
Ambientado en la mitología griega, la Asociación Horizonte organizó uno de estos juegos para los menores del programa de prevención CIS en el que, los niños, se quedaban atrapados en las instalaciones del CIS La Patera y la única forma de “salir”, era superando los 7 retos que se le propusieron y la prueba final.
El juego comenzó justo en el momento en el que se formaron dos equipos mixtos con niños pertenecientes a los dos centros que abarcaban desde los 7 hasta los 13 años. Mientras un grupo esperaba su turno para entrar en el Escape Room, el primero de los grupos quedó encerrado en la biblioteca del centro donde un misterioso pergamino les advertía que debían descifrar el mensaje encriptado que tenían sobre la mesa, para salir de la biblioteca. Para ello necesitaron encontrar el código.
A partir de ahí se sucedieron 6 pruebas más que implicaban destreza manual; aplicar la lógica para resolver un acertijo; juego de coordinación grupal; una actividad en el que los niños debían seguir unas instrucciones pero para conseguir el objetivo, debían hacer justo lo contrario a las instrucciones dadas; un juego de resistencia, otro de memoria y uno de deducción.
Cada prueba les aportaba piezas para formar el Tótem final utilizando el famoso juego del Tangram. La prueba final consistía formar el Tótem de los Dioses usando estas piezas.
“Liberado” el primer equipo cuando superaron todos los retos fue el turno para el segundo equipo. Ellos también cayeron presos de la ira de los Dioses y tuvieron que completar su odisea.
En general, los niños disfrutaron mucho no solo de la actividad en sí sino también de la tarde de convivencia con los compañeros del otro centro. Para finaliza la tarde, una merienda saludable, despedidas y vuelta a casa.
Como siempre aprovechamos estas últimas líneas para agradecer a PIVESPORT el trabajo de coordinación del proyecto. A las estudiantes universitarias que están haciendo sus prácticas en los CIS de Horizonte su ayuda e ideas para enriquecer el juego y, en especial, a los chicos de nuestra Vivienda de Apoyo al Tratamiento que ayudaron a los menores cuando los retos se les ponían un poco cuesta arriba.