La visita al campo quemado contada por una prometedora escritora
Por Trini Castro (del Centro de Integración Socioeducativa Horizonte de El Ángel)
El martes pasado hicimos una salida y fuimos los niños de los dos CIS, La Patera y El Ángel, con nuestras monitoras y dos de las voluntarias: María José, María del Mar, Ana y Amparo. Nos recogieron delante de la capilla de El Ángel, junto a nuestro Centro. Un autobús nos llevó hasta una finca llamada La Atalaya, situada en lo alto del Rosario que es una gran urbanización de Marbella. Después de recogernos a nosotros pasamos a recoger a los niños de La Patera.
Alejandro, de Arborétum ya estaba con ellos. Cuando llegamos a la finca, Alejandro nos dio una charla sobre el incendio del pasado 30 de agoto y nos habló de muchas cosas muy interesantes; una de ellas es que sobrevivieron las plantas que son autóctonas de la zona, que hay 147 especies y que entre ellas están el alcornoque, los palmitos, las adelfas, etc. También otras de las cosas que nos contó es que, cuando llueve, las semillas son arrastradas por el agua hasta el mar donde, por efecto del agua salada, se mueren.
Una de las cosas más curiosas que nos enseñó es que cuando un pino se quema las piñas con la resina explotan y los piñones, que son las semillas, se expanden hasta unos 100 metros. También que cuando un campo se quema, el 90% o el 95% de las veces es culpa del hombre y el otro 5% o 10% lo causa la naturaleza, y que para reforestar ese campo es necesario que pase mucho tiempo, tanto como entre 20 y 40 años.
Así que atendiendo a esas consecuencias, desde aquí os pido, os pedimos, que cuidemos más el campo y que no se tiren objetos o se realicen actuaciones que puedan causar incendios. Su futuro es nuestro futuro. Nosotros, los niños y niñas de hoy, hombres y mujeres de mañana, os lo agradecemos.
Andres
18 octubre 2012 @ 14:24
Creo muy positivo que los niños se den cuenta de lo importante que es proteger el planeta donde vivimos todos.
Hay que felicitar a las monitoras que organizaron la excursión.
La foto del autobus me trae recuerdos entrañables.